Cirugía plástica y medicina estética
Reducción de mamas
La reducción de mamas es aquella cirugía mediante la cual, además de quitarle volumen al pecho, lo colocamos a su altura ideal y cambiamos su forma, dejándo el pecho firme, alto, redondo y en proporción con el resto de tu cuerpo. También se puede aprovechar esta cirugía para hacer más pequeñas las areolas (piel oscura que rodea al pezón).
Cirugía plástica y medicina estética
Reducción de mamas
La reducción de mamas es aquella cirugía mediante la cual, además de quitarle volumen al pecho, lo colocamos a su altura ideal y cambiamos su forma, dejándo el pecho firme, alto, redondo y en proporción con el resto de tu cuerpo. También se puede aprovechar esta cirugía para hacer más pequeñas las areolas (piel oscura que rodea al pezón).
La cirugía de reducción mamaria a paso a paso
Reducción de pecho en Alicante
La cirugía de reducción de pecho se realiza bajo anestesia general, a cargo de un anestesista en un hospital acreditado, por lo que tiene la seguridad de más alto nivel. Para ello, una vez dentro del quirófano, te administraremos un sedante (tranquilizante) que te produce sueño (y tal vez una leve sensación de mareo) y hace que no notes nada, y a continuación otros medicamentos necesarios para la anestesia.
Lo primero que haremos tras dormirte es preparar el campo quirúrgico, para luego recolocar los pezones a su altura correcta y eliminar el exceso de tejido sobrante en la mama. La piel de ambos lados del seno, se trae alrededor de la areola dándole forma a una mama más redondeada y turgente. En algunas ocasiones se realiza además una liposucción Wal del lateral de la mama.
La técnica a realizar para la reducción mamaria será la elegida por consenso entre el cirujano plástico y la paciente en las consultas previas a la cirugía. Haremos todo lo posible para que las cicatrices sean imperceptibles, colocándolas en lugares estratégicos, haciéndolas tan cortas como se pueda y suturándolas con las técnicas más estéticas posibles.
Tres son las cicatrices clásicas para reducción mamaria:
- Alrededor de la areola (cicatriz periareolar). Siempre se utiliza.
- Entre la areola y el surco submamario (cicatriz vertical). Prácticamente siempre se usa.
- En el mismo surco submamario. Se usa sólo en combinación de las otras dos en los casos en los que sobra más piel. Será más larga cuanta más piel sobre y más corta en los casos más leves.
En caso de querer colocar un implante en la reducción de pecho, se aprovechará cualquiera de ellas. En algunos casos se usa sólo la primera, en otros las dos primeras y lo más frecuente es que se usen las tres cicatrices. Cada una de las opciones tiene sus ventajas e inconvenientes. La mejor técnica es la más adaptada a cada tipo de mama. Juntos decidiréis qué es mejor para tu caso.
Luego el doctor cerrará en varias capas para asegurar que el resultado es óptimo en tu cirugía de reducción de pecho. Todas las suturas utilizadas son absorbibles, por lo que no hace falta quitar los puntos. Para que las cicatrices sean lo menos perceptibles que sea posible, cierra la herida desde dentro, para que no se vean los puntos.
Habitualmente tras una reducción mamaria, el Doctor Solesio no emplea drenajes debido a la meticulosidad con la que coagula los vasos sanguíneos. Esto lleva algo de tiempo, pero ahorra muchas molestias postoperatorias.
En total, la cirugía de reducción mamaria se realiza en entre 2 y 4 horas.
Siempre, permanecéis un tiempo de recuperación en el área quirúrgica y cuando estáis estables y seguras, se os sube a la habitación.
Por último, si el alta no se produce el mismo día, al doctor le gusta por seguridad, realizar una cura para comprobar que todo está correcto y limpio antes de enviaros a casa y os prepara un informe de alta detallado y completo en el que viene, por escrito, el tratamiento a seguir en casa y otras recomendaciones, así como el teléfono 24 horas.
Galería de imágenes
Fotografías antes y después de reducción de pecho
- ¿En qué consiste la reducción de pecho?
- Tipos de cicatrices en una reducción de pecho
- Asociar un aumento de pecho a una reducción mamaria
Tener unos senos demasiado grandes, puede ser un problema además de resultar muy incómodo. Cuando el tamaño de las mamas es excesivo os duele la espalda, se os clava el tirante del sujetador, se os irritan los pliegues bajo los pechos, son incómodos al hacer deporte, limitan vuestro bienestar social, hacen que sea difícil vestir con lo que os gusta, los bikinis no sientan bien y hacen que parezca que ese pecho corresponde a una mujer de mayor edad. En casos extremos pueden llegar a doler y/o a provocar dificultad respiratoria.
Para solucionarlo existe la mamoplastia de reducción (reducción de pecho). Es el nombre que le damos a la cirugía mediante la cual, además de quitarle volumen al pecho, lo colocamos a su altura ideal y cambiamos su forma, dejándolos firmes, altos, redondos y en proporción con el resto de tu cuerpo. También se puede aprovechar esta cirugía para hacer más pequeñas las areolas (piel oscura que rodea al pezón).
La reducción de pecho cuando está bien indicada, es una cirugía que os satisface mucho, os devuelve la libertad de estar cómodas con vuestro pecho. La reducción mamaria ayuda a recuperar la autoestima tras ver cómo el paso del tiempo ha descolgado el pecho. La paciente se siente más atractiva y segura de sí misma, mejorando su autoestima y repercutiendo muy positivamente en su entorno social, conyugal y laboral.
Si un pecho es muy grande, lógicamente tendrá mucha piel. Si lo reducimos, nos sobrará piel, y esta piel habrá que quitarla. Al cortar la piel para quitarla, se crearán cicatrices ya que las heridas tienen que cicatrizar. De todo esto podemos deducir que cuanto más grande sea el pecho, más exceso de piel habrá y por tanto, mayores serán las cicatrices tras la reducción mamaria.
Sin embargo existen técnicas específicas para reducir la longitud de la cicatriz. Durante varios años el Doctor Solesio se ha especializado en diferentes técnicas para reducir las mamas, incluyendo las técnicas con cicatrices mínimas. Por ello es importante saber emparejar bien cada caso con su técnica más adecuada, para garantizar así los mejores resultados en una reducción mamaria.
El Doctor coloca las cicatrices en lugares estratégicos, donde las cicatrices pasan más desapercibidas. Normalmente las cicatrices evolucionarán durante meses viéndose cada vez menos hasta alcanzar aproximadamente el año, momento en el que suelen estabilizarse y adquirir su aspecto final.
¿Aumentar y reducir el pecho a la vez? Sí, suena paradójico, pero no lo es.
Muchas veces, cuando tenéis un pecho muy caído, se os queda muy plana la parte más alta del pecho (la del escote). Es como si el pecho fuera demasiado grande en su parte de abajo y demasiado pequeño en la parte de arriba. Si os levantáis el pecho, no llega a abultarse la parte del escote.
Para solucionar esto puede practicarse una reducción/elevación del pecho y además rellenar la parte de arriba con una prótesis de silicona o, como alternativa, con una autoprótesis biológica hecha del propio tejido de la mama, que le da un aspecto más natural y evita las posibles complicaciones de las prótesis mamarias. Los resultados son espectaculares.
- ¿En qué consiste la reducción de pecho?
- Tipos de cicatrices es una reducción de pecho
- Asociar un aumento de pecho a una reducción mamaria
Tener unos senos demasiado grandes, puede ser un problema además de resultar muy incómodo. Cuando el tamaño de las mamas es excesivo os duele la espalda, se os clava el tirante del sujetador, se os irritan los pliegues bajo los pechos, son incómodos al hacer deporte, limitan vuestro bienestar social, hacen que sea difícil vestir con lo que os gusta, los bikinis no sientan bien y hacen que parezca que ese pecho corresponde a una mujer de mayor edad. En casos extremos pueden llegar a doler y/o a provocar dificultad respiratoria.
Para solucionarlo existe la mamoplastia de reducción (reducción de pecho). Es el nombre que le damos a la cirugía mediante la cual, además de quitarle volumen al pecho, lo colocamos a su altura ideal y cambiamos su forma, dejándolos firmes, altos, redondos y en proporción con el resto de tu cuerpo. También se puede aprovechar esta cirugía para hacer más pequeñas las areolas (piel oscura que rodea al pezón).
La reducción de pecho cuando está bien indicada, es una cirugía que os satisface mucho, os devuelve la libertad de estar cómodas con vuestro pecho. La reducción mamaria ayuda a recuperar la autoestima tras ver cómo el paso del tiempo ha descolgado el pecho. La paciente se siente más atractiva y segura de sí misma, mejorando su autoestima y repercutiendo muy positivamente en su entorno social, conyugal y laboral.
Si un pecho es muy grande, lógicamente tendrá mucha piel. Si lo reducimos, nos sobrará piel, y esta piel habrá que quitarla. Al cortar la piel para quitarla, se crearán cicatrices ya que las heridas tienen que cicatrizar. De todo esto podemos deducir que cuanto más grande sea el pecho, más exceso de piel habrá y por tanto, mayores serán las cicatrices tras la reducción mamaria.
Sin embargo existen técnicas específicas para reducir la longitud de la cicatriz. Durante varios años el Doctor Solesio se ha especializado en diferentes técnicas para reducir las mamas, incluyendo las técnicas con cicatrices mínimas. Por ello es importante saber emparejar bien cada caso con su técnica más adecuada, para garantizar así los mejores resultados en una reducción mamaria.
El Doctor coloca las cicatrices en lugares estratégicos, donde las cicatrices pasan más desapercibidas. Normalmente las cicatrices evolucionarán durante meses viéndose cada vez menos hasta alcanzar aproximadamente el año, momento en el que suelen estabilizarse y adquirir su aspecto final.
¿Aumentar y reducir el pecho a la vez? Sí, suena paradójico, pero no lo es.
Muchas veces, cuando tenéis un pecho muy caído, se os queda muy plana la parte más alta del pecho (la del escote). Es como si el pecho fuera demasiado grande en su parte de abajo y demasiado pequeño en la parte de arriba. Si os levantáis el pecho, no llega a abultarse la parte del escote.
Para solucionar esto puede practicarse una reducción/elevación del pecho y además rellenar la parte de arriba con una prótesis de silicona o, como alternativa, con una autoprótesis biológica hecha del propio tejido de la mama, que le da un aspecto más natural y evita las posibles complicaciones de las prótesis mamarias. Los resultados son espectaculares.